NO MAMES GUEY

NO MAMES GUEY…

Dejar Creel no fue tan fácil como yo me la habría esperado, pero qué sentido tendría imaginar lo inimaginable?

Me lleve conmigo a esas miradas sinceras y tímidas de los tarahumaras, esos que aún luchan por sus queridas tierras, por sus tradiciones aunque estén tan azotados por las injusticias de los otros que deciden sobre su futuro sin ni siquiera preguntarles si están de acuerdo, aun así ellos siguen siendo fieles a sus tradiciones y su maravillosa forma de vida.

Dejando Creel, me fuí con las maravillosas leyendas que tantas veces calentaron mis frías noches, y me fuí atraído de nuevo por lo desconocido, pero este aun eran más subidas, subidas que me obligaban a gritar bien alto esta común expresión mexicana, “No mames guey ”que quiere decir más o menos, “ No jodas”, pero luego al ver mi sudada sombra dibujada en el asfalto, me daba cuenta que no debía engañarme, que yo era mi única causa, mi único dolor, mi solo fracaso, pero a la vez también mi alegría, mis éxitos, mi paz..

SOMBRA/ SHADOW

Montones de sonrisas en mi mente me ayudaban a avanzar, y con mi mirada fija hacia adelante y mis sueños intactos, seguí buscando las señales de esta vida, la misma que nos ayuda a descifrar todo aquello por lo que vale la pena vivir.

Y así sin ninguna pausa que me hiciera flojear, llegué a tierras más llanas, más fértiles y productivas, llegué a ese lugar donde los Menonitas, esa extraña raza de ojos azules, vestidos austeros y con su alemán bajo, un día con mucho esfuerzo hicieron productiva una de las regiones más áridas de México, pero con sueños, ilusiones y la magia de creer en lo que sentimos, consiguieron hacerse un lugar muy importante en este país.

ESTE PAIS / THIS COUNTRY

De allí me dirigí hacia Chihuahua, esta gran ciudad envuelta de cerros como aquí los llaman, allí de nuevo me acogieron a la Mexicana, con todo su amor, compartí de nuevo leyendas, algunas del mismísimo Pancho Villa, chihuahuense de la cabeza a los pies, villano para algunos, ídolo para otros, pero para mí de nuevo la gran suerte de aprender.

VIVA PANCHO

Y así es como continuo teniendo muchos motivos para creer en la vida, y ahora aún tengo muchos más que el simple hecho de formar las líneas de todo lo que escribo, motivos que muy pronto me harán disfrutar aún más de la vida, hacerlo como si del ultimo día se tratara, aunque aún quedan esos pocos que se atreven a plasmar la ira contra los otros, hace poco uno me escribía un comentario diciéndome que coño hacia yo en Vallarta?

La verdad es que me rio de toda esta hipocresía, me rio de toda esta guerra de conciencias, y me quedo aunque sea en la distancia con la seguridad de que un abrazo puede llegar a decir tantas cosas, tantas, que cuesta muchísimo describirlas en palabras.

Continuaré aquí fuera, lejos de estos altos muros que “protegen” nuestras vidas, nuestro confort, y a la vez abriendo las puertas del engaño.

“No mames guey”, pues eso me invade escalofríos cuando huyo de mi realidad, pero tú mi vida eres quien altera mis sentidos ayudándome a creer profundamente que el amor aún existe…

El camino continuo, la ilusión sigue firme, he aprendido a olvidar y me miro este azul cielo mexicano, soporto este pesado calor, y a la vez gozo de pletóricas noches llenas de estrellas.

Halima, me dio algún susto estos días, pero también y como siempre fielmente me ha acercado a esas gentes que se cruzan en mi camino y que me ayudan a comprender que mis días pasan como la poesía, la melancolía, las bellas tardes y esas albas puras, pero mi existencia no sería nada si no creyera en ti, mi sueño…

HALIMA / HALIMA´S

Mi destino continua derritiéndose por estas llanuras, por esos anhelos de poder ayudar, de poder simplemente continuar siendo quien soy, de sentir la felicidad, y continuar luchando entre estas rutas que nos acercan cada día más a estas cosas que hemos visto en nuestros sueños.

Continuare acariciando caminos, carreteras con las ruedas de Halima, lo haré por mis propios senderos, porque me basta verte en sueños para inspirarme, continuaré creyendo en el valor de que somos quien somos, ni más ni menos, ni mejores ni peores, pero eso sí, libres, y esta libertad siempre me dará alas, no me abandonaré en miedos, haré que los sufrimientos solo consigan dar más brillo a mis colores, continuaré rompiendo cualquier lazo que me ate a la rutina, viviré de la mejor manera que siento, porque en todos estos años he llegado a comprender que nunca debo discutir con mi conciencia, ni mucho menos con mi corazón.

Llegué a una ciudad llamada Torreón, en el estado de Coahuila, pero mis ojos miran ya 3000km más lejos hacia el sur, mi corazón late cada día, y no transformo sueños en fugas.

CATEDRAL DE TORREON / TORREON´S CATHEDRAL

Pero mientras este aquí, en esta ciudad brillara otra estrella, y no me olvidaré de aquellos que no pueden ver más allá, aquellos que la escalera de sus vidas es un gran obstáculo, pero de nuevo gracias a la ayuda del amable Jorge Dueñes y sus amigos  tendré de nuevo la oportunidad de poder ayudar, haré que vean más allá y a la vez gritaré alto y claro, “No mames Guey”.

La vida, que maravilloso estar aquí, ayer hablé contigo en la distancia, hoy he observado las nubes en este cielo, y he intentado ver en las estrellas el brillo de tus maravillosos ojos que siempre me ayudan a entender que todo se puede lograr.

El tiempo no perdona, y quiero entender que la soledad ayuda a reflexionar.

Con un rio discreto me dirigiré hacia el mar, mi rumbo continuará después de ayudar a otros renacuajos, continuará hacia el sur y estoy seguro que bien pronto otra puerta en mi vida se abrirá, detrás de ella, un reposo, un sendero incierto pero eso sí, lleno de ternura, qué más puedo pedir?

Me llevo conmigo esas miradas sinceras y tímidas, esas mismas que no necesitan palabras para comprender que la vida son todos estos instantes que te hacen sentir libre.

PARA TRIUNFAR PRIMERO DEBEMOS CREER QUE PODEMOS.

SALUD Y BUEN CAMINO, NANDO